viernes, 31 de diciembre de 2010

Novedades Premium

Hola mis queridísim@s,

Siento si os preocupado con mi ausencia. Todo anda bien, he estado absorbida en eso que llaman emancipación. Disculpad que no os haya visitado, me ha faltado energía, ese bien excaso en mi 2010. Pronto os enseño la nueva cocina de Haciendo Buenas Migas. Hoy vengo de comentarista, gracias a Bloguzz y La Sirena. Para los que no conozcáis Bloguzz, pinchad aquí . De manera breve; los bloggers tenemos la opotunidad de registramos en la web y acceder a productos, que pruebas y después opinas sobre ellos. ¿ Y quién no conoce La Sirena? ¡Son los especialistas en congelados! Más info aquí. Con más de 25 años de experiencia. Más de 230 establecimientos en España. Disponen de una extensa variedad de alimentos (pescado, marisco, verdura, carne, precocinados, preparados, pizza, helados, pastelería...Platos especiales para Navidad) y en algunas zonas puedes compar online (con productos, tarifas y ofertas específicas para estas tiendas online) y con reparto a domicilio. Mi curiosidad por probar unas de las delicatessen que ofrecían en Bloguzz hizo que me apuntara a la promoción y fui seleccionada. Ilusionada recibí las mini conchas de vieira (Novedades Premium) en la mesa de Navidad junto con otros aperitivos. Las mini vieiras se presentan en un estuche de 8 unidades y tiene una facílisima preparación: calentar el horno a 200º, colocarlas en una bandejita y entre 8 -12 minutos las tienes listas. El olor que desprenden en el horno hacen que la boca se te haga agua...¡Qué delicia! Se pueden comer como una cucharilla de aperitivo o utilizar un tenedor pequeño para recoger el relleno. La suave carne de vieira se funde en la ligera salsa con champiñes, tiene finos trocitos y un sutil sabor a queso. ¡Hasta la conchitas te comerías! Son ideales para aperitivos de comidas, cenas, para cualquier ocasión que quieras soprender a los comensales...En la imagen de la caja de envase muestran una sugerencia de presentación, pero yo no dudé en sacar mis platos de pizarra para que contrastaran con el rojo del mantel, aunque fue lo de menos, el protagonismo se lo ganaron ellas mismas, todos quedaron prendados con las mini conchas y a parte de felicitarme, querían más. ¡Y la receta! ... La amfitriona, vestida de galardones, tuvo que desvelar el origen de la delicatessen. ¡Más fans de La Sirena!

Las mini vieiras en su estuche

¡Listas para comer!



También me regalaron un libro de recetas;"Cocina Low Cost La Sirena". ¡Un tesoro! Lo encontraréis en la misma tienda.


En estos días de prisas, de querer comer bien y quedar como una reina, de disfrutar al máximo de la familia, nada mejor que aliarse con estos productos estrella que nos facilitan el quehacer. ¿Así, quién no es fanático del congelado La Sirena? Esta noche volvemos a repetir y alguna cajita dejo para Reyes...Aunque cualquier ocasión es buena para disfrutar de estos irresistibles bocados. Ha sido un placer ser comentarista por un día. ¡Muchas gracias a el equipo de Bloguzz y a La Sirena!

Espero que estéis disfrutando de estos días en la mejor compañía, que esta noche por un ratito olvidéis los malos momentos de este año y despertéis con ilusión para afrontar los retos del 2011. Y ya para despedirnos, porque no podría ser de otra manera, os dejo con Manuel Vicent, con el fragmento final de un artículo que publicó en enero de 2009 y siempre lo tengo a mano:

"(...) Lo mejor que uno puede desear para el año nuevo son felices sobresaltos, maravillosas alarmas, sueños imposibles, deseos inconfesables, venenos no del todo mortales y cualquier embrollo imaginario en noches suaves, de forma que la costumbre no te someta a una vida anodina. Que te pasen cosas distintas, como cuando uno era niño". (Pinchad aquí para leerlo entero).

¡Qué no falte salud, amor y trabajo! ¡Con mis mejores deseos, un beso grande, corazones!

domingo, 24 de octubre de 2010

¡Se me olvidó!

El 1 de octubre hizo un año Haciendo Buenas Migas y yo me olvidé. Como no me acordé no he preparado nada especial. ¿Qué os parece si os dejo unos profiteroles para celebrarlo? ¡Qué muchos años más disfrutemos de este enriquecedor mundillo!


La receta, “lioneses o profiteroles farcides de mel i mató o de nata o…”, es de la fantástica Mireia Carbó y la encontraréis en su libro “La cuina et dóna joc”.

Ingredientes
- 3 huevos
- 125ml de leche
- 75gr de harina
- 60gr de mantequilla
- Un pellizquín de sal
- 1 huevo batido para pintar
- Una tarrina de requesón para rellenar los profiteroles
- Miel y dulce de leche para acompañar

Preparación
- En un cazo calentaremos la leche, la mantequilla y el pellizquín de sal. Lentamente vamos removiendo para que nos se pegue. Cuando hierva añadiremos la harina, removeremos sin parar para que no se pegue y se cueza. Una vez la masa se despegue del cazo ya estará lista.
- A continuación retiramos del fuego y vamos añadiendo los huevos, de uno en uno. Cada vez que incorporemos uno mezclaremos bien, hasta que lo confundamos con la misma masa.
- Calentamos el horno, arriba y abajo, a 200º. En la bandeja del horno ponemos un papel de horno o bien lo untamos con aceite. Volvemos a la masa, la cual colocaremos en una manga pastelera o en un bolsa de congelar nueva (si optamos por la segunda opción recordad cortarle una puntita a la bolsa para utilizarla como manga pastelera).
Ahora ya podemos hacer montañitas sobre la bandeja del horno. Las pintamos con el huevo batido y al horno.
- Horneamos de 8 a 10 minutos, más o menos, ya veréis que estarna cuando cojan ese
colorcito doradito, de profiterol! Fuera del horno los dejamos enfriar y ya podemos hacerles un corte para rellenarlos, en este caso de requesón con una filigrana de miel o de dulce de leche.
Y ya por último, traduzco una sugerencia de Mireia muy interesante:
Tened en cuenta que la pasta de las lionesas es muy delicada. En el momento que sale de horno se ve muy crujiente y después se ablandece y baja. Es importante saberlo, porque si os pasa, sabed que no habéis hecho nada mal. Pasa en las mejores familias. Si las probáis descubriréis que son buenísimas.

Yo hice dos hornadas; la primera se bajaron y además las hice diminutas, a penas las pude rellenar, más bien quedaron para mojar en la leche, la segunda podéis verla en las fotos…


En el horno
Ya rellenitos

De requesón y miel


De requesón y dulce de leche

¡Una tentación irresistible!
¿Os atrevéis?
Un abrazo y feliz semana, corazones.



jueves, 30 de septiembre de 2010

I love Falset

Ya hace tiempo que es otoño en el Corte Inglés, pero hasta que con las últimas tormetas no hemos tenido que echar mano al nórdico no nos lo queríamos creer. ¡Jeje! Ya podemos ir preparando la cuchara para disfrutar de una larga temporada de sopas y cremitas. Hoy vamos a despedir septiembre con una entrada deluxe, una de mis palabras favoritas, habrá que darle algo de contenido al subtítulo del Haciendo Buenas Migas: recetas, calditos y otros placeres del arte del buen vivir. Recetas hay, aunque publique con cuenta gotas, calditos me parece que los últimos descubrimientos están pendientes, pendientes de incorporar en la bodega... y los otros placeres del arte del buen vivir, ¿Qué les ha pasado? ¿Me acompañáis? ¡Vamos a rescatarlos!

Breve historia del vino
Dudas razonables nos impiden saber si Adán fue tentado por una manzana o por una uva.
Sí sabemos, en cambio, que hubo vino en este mundo desde la Edad de Piedra, cuando las uvas ya fermentaban sin ayuda de nadie.
Antiguos cánticos chinos recetaban el vino para aliviar las dolencias de los tristes.
Los egipcios creían que el dios Horus tenía un ojo de sol y otro de luna, y el ojo de luna lloraba lágrimas de vino, que los vivos bebían para dormirse y los muertos para despertarse.
Una vid era el emblema del poder de Ciro, rey de los persas, y el vino regaba las fiestas de los griegos y de los romanos.
Para celebrar el amor humano, Jesús convirtió en vino el agua de seis tinajas. Fue su primer milagro.


Espejos: una historia casi universal, de Eduardo Galeano.


Así como un milagro, a primeros de mayo tiene lugar la Feria del Vino de Falset, capital del Priorat, se encuentra situado al sudeste de la comarca, en un valle rodeado de montañas, entre ellas la Roca Roja, el Morral y la Sierra de Llaberia y en el mismo centro de la cuenca del río Siurana, entre el Camp de Tarragona y el nudo del Ebro. Un pueblo encantador y todos los de su alrededor. Campos y campos de garnacha, cariñena, cabernet-sauvignon, merlot…Almendros y olivos ¡Aiii, ese aceite de arbequinas! Por instantes quedas anestesiada de la belleza del entorno. Pues como os iba diciendo, las románticas calles de Falset se convierten en un inigualable museo para acoger y mostrar los vinos de las dos denominaciones de la comarca: la DO Priorat y la DO.Montsant. Las bodegas ofrecen sus vinos en un seguido de paraditas que suben hasta el Castell del Vi. Se prueban vinos a través de un sistema de compra de vales de degustación. El Castell está abierto, son muchas las bodegas que también abren sus puertas y viñedos a los visitantes, se hacen catas profesionales en el instituto de secundaria, conferencias, catas de aceite, concursos, la cocina se viste de gala... ¡Hay que ir en vacaciones para hacer una ruta gastronómica! En definitiva, un sinfín de actividades que esperamos de un año para otro con una ilusión incontrolable. Esta festividad, como buena devota de Dionisio, permanece en mi memoria, en la categoría de “otros placeres del arte del buen vivir”. Un placer compartido con El Cuiner de les Emocions (¡Es fantástico! Cargó el maletero para que no faltasen existencias). Con frecuencia nos recreamos tomando uno de los souvenirs del Priorat. ¡Jeje!

A continuación los preferidos de esta edición,
fotos del álbum "Wines&Lovers" del Cuiner de les Emocions:


Solpost, DO Montsant



Perinet + Plus, DO Priorat




Clos Dominic, Vinyes Baixes, DO Priorat


Parada obligatoria en Gratallops, en el inolvidable Irreductibles (restaurante de dos estrellas de la enología, Sara Pérez y René Barbier hijo); exquisita cocina y un maridaje excelente.


El Cuiner de les Emocions se concentra en la extensísima carta de calditos


Ésta soy yo en las puertas del paraíso


En homenaje a l@s que estan de vendimia y a los amig@s de LaCopa (búscanos en el facebook, LaCopa amics dels vins)

este tartar de higos frescos y mozzarella, con crocanti de avellana y dados de moscatel:



Ingredientes para el tartar

- Unos 6 higos

- Una bola de mozzarella

- Un puñadito de avellanas picadas (para el crocanti preparar un caramelo y antes de retirarlo del fuego añadir las avellanas)

- Menta fresca y nata líquida para decorar

Preparación

-Pelamos y cortamos a trocitos los higos, a continuación cortaremos a dados la mozzarella. Mezclaremos con cuidado para que no acabe todo triturado y reservamos.


Ingredientes para la gelatina de moscatel

- 100ml. de moscatel

- 6 hojas de gelatina

Preparación

Pensad en hacerla unas 4 horas antes de montar el plato

- Ponemos a remojar las 6 hojas de gelatina.

- En el micro calentamos el moscatel. Escurrimos las hojas de gelatina y las incorporamos en el moscatel calentito, removemos hasta deshacer bien. Vertemos en un recipiente plano y cuando se haya enfriado lo guardaremos en la nevera.

- Para montar el tartar me ayudé de un aro (la medida utilizada en este caso da para dos comesales), el cual iremos rellenando, sacamos despacito hacia arriba y ya lo tendremos. Coronamos con el crocanti de avellanas.

- Desmoldamos la gelatina y cortamos a daditos. Decoramos con ella. Para destacar los colores jugué con nata líquida haciéndole una base. El toque final lo pone la menta fresca, al no tener a mano tuve que poner unas hojillas de albahaca para la foto. Lo ideal es el aroma fresco de la menta para seguir con una cucharada de tartar y después un dadito de moscatel, que en gelatina recuerda el sabor del higo seco. El contraste de sabores y texturas es fantástico.

Espero que os guste. Ya me diréis si es un bocado deluxe ¡Jeje!

¡Besos para tod@s, corazones!

Ahí van directos para Cairns dos besos graaaandes, para mis cuores aventureros.




lunes, 16 de agosto de 2010

Gazpacho de pepino

¿Qué trabajo menos que la modista de Tarzán?
Va a ser que sí, mis queridísimos. Demasiado tiempo ha pasado desde el último post. Ni el trabajo, ni el calor, ni los siete troyanos que albergaban mi ordenador justifican este silencio. Como dice Pepa, ando vaga. Pero me ha encantado que aun así siguierais visitándome, mimándome…¡Gracias Pepa, Luz y Juan! ¡Gracias a tod@s!
La pereza se juntó con la tristeza, el jueves despedíamos a la abuela, la abuela María, la abuela de todos. Con sus 100 años y nueve meses. Presentes nos quedan tantísimos buenos momentos a su lado y un sinfín de recetas tradicionales que iremos publicando. Sumida en la melancolía recibí la bonita noticia que era la usuaria de la semana de Canal Cocina,
con mi gazpacho de pepino con picadillo de tomate y bocado de jamón. ¡Qué ilusión!




Ingredientes
-1 pepino
-1/2 diente de ajo
- 2 tomates grandes
- 2 cucharadas soperas de queso de untar
- sal
- pimienta
- un chorrito de aceite
- 4 lonchas de jamón serrano

Una receta fresca y sencilla para estos días de calor...


Preparación
- Cogemos el pepino, lo pelamos, lo cortamos a trocitos y lo añadimos en el vaso de la túrmix con el medio ajo y las dos cucharadas de queso de untar. Trituramos hasta dejar una fina crema y reservamos en la nevera.
- A continuación, cogemos de la nevera los tomates que cortaremos en daditos, salpimentaremos y bañaremos con un chorrito de aceite. Mezclamos con cuidado. Ya podemos rellenar el fondo de las copas dónde vayamos a servir el gazpacho, hasta la mitad más o menos. En este caso utilicé las copas de licores dulces.
- Con el picadillo en las copas podemos verter el gazpacho (la crema fina de pepino) y decorar cada una con un sencillo rollito de jamón serrano.

Espero que os guste y como me repetía la abuela, disfrutad todo lo que podáis.
Así es que el jueves volvemos con el Cuiner de les Emocions al St.Pau, seducidos por el particular menú de verano que brindan Carme Ruscalleda y su equipo.
Un abrazo, corazones.

lunes, 21 de junio de 2010

Las olas

El mar es sólo un conjunto de olas sucesivas, igual que la vida se compone días y horas, que fluyen una detrás de otra. Parece una división muy sencilla, pero esta operación, incorporada a la mente, ha salvado del naufragio a innumerables marineros y ha ayudado a superar en tierra muchas tragedias humanas. Recuerdo haberlo leído, tal vez, en alguna novela de Conrad. Si en medio de un gran temporal el navegante piensa que el mar encrespado forma un todo absoluto, al ánimo sobrecogido por la grandeza dela adversidad entregará muy pronto sus fuerzas al abismo; en cambio, si olvida que el mar es un monstruo insondable y concentra su pensamiento en una ola concreta que se acerca y dedica todo el esfuerzo a esquivar su zarpazo y realiza sobre el una victoria singular, llegará el momento en que el mar se calme yel barco volverá a navegar de modo placentero. Como las olas del mar, los días y las horas baten nuestro espíritu llevando en su seno un dolor o un placer determinado que siempre acaba por pasar de largo. Cuando éramos niños desnudos en la playa no teníamos conciencia del mar abstracto, sino del oleaje que invadía la arena y contra el se establecía un desafío. Cada ola era un combate. Había olas muy tendidas que apenas mojaban nuestros pies y otras más alzadas que hacían flotar nuestro cuerpo; algunas llegaban a inundarnos por completo con cierto amor apacible, pero, de pronto, a media distancia de nuestro pequeño horizonte marino aparecía una gran ola muy cóncava adornada con una furiosa cresta de espuma que era percibida con gritos sumamente excitados: Los niños nos preparábamos para afrontarla: los más audaces preferían atravesarla clavándose en ella de cabeza, otros conseguían coronarla acomodando el ritmo corporal a su embestida y quienes no veía en ella una lucha concreta, sino un peligro insalvable, quedaban abatidos y arrollados. Con cuánto placer dormía uno esa noche con los labios salados y el cuerpo cansado, abrasado por el sol, pero no vencido. La práctica de aquellos baños inocentes en la orilla del mar es la mejor filosofía para sobrevivir a las adversidades. El infinito no existe, el abismo es sólo un concepto. Las pequeñas tragedias de cada día se componen de olas que baten el costado de nuestro navío. La única sabiduría consiste en dividir la vida en días y horas para extraer de cada una de ellas una victoria concreta sobre el dolor y una culminación del placer que te regale. Una sola ola es la que te hace naufragar. De esa hay que salvarse.

Manuel Vicent, en “El cuerpo y las olas”


Cuando yo no encuentro palabras para expresarme siempre tengo a mano a Manuel Vicent. Espero que disfrutéis la reflexión.
Aprovechando que estamos en alta mar os dejo con esta sencilla receta que copié del programa Cuines en TV3: calamares con crema de cebolla y guisantes. La autora es Mey Hofmann del restaurante Hofmann de Barcelona. A continuación mi versión, me salté la decoración con tempura porque mis comensales estaban hambrientos…

Ingredientes
- 2 o 3 calamares por persona, según el tamaño.
- 2 cebollas grandes de Figueres (cebolla dulce)
- 2 dientes de ajo
- Hoja de laurel
- Aceite y sal
- 2 hojas de menta para guisar
- 300 gr. de guisantes
- Alguna hoja de menta para decorar

Preparación
- Limpiamos bien los calamares vigilando no liar un festival de tinta en la cocina. Una vez limpios, lavamos uno por uno y dejamos escurrir.
- Cortamos las cebollas en tiras finas, sazonamos, las ponemos en una sartén a fuego medio y cocinamos lentamente. Cuando las veamos transparentes añadiremos los dos dientes de ajo que habremos laminado y la hoja de laurel. Dejamos que se acaben de hacer. A continuación a apartamos la sartén del fuego, retiramos la hoja de laurel y pasamos la cebolla por el túrmix. ¡Ya tenemos la crema lista!
- En la misma sartén salteamos los guisantes (que previamente habremos cocido) con las dos hojitas de menta.
- Al mismo tiempo, pero en otra sartén, podemos ir haciendo los tubos de calamar con un chorrito de aceite, sal y dejamos hasta que estén bien doraditos. Así todo saldrá al mismo tiempo y no se enfriará.
Y ya por último montamos el platillo: cortamos los calamares a la altura de las aletas, rellenamos con guisantes, colocamos los trozos de calamar, más guisantes, las patitas, una cucharada de crema de cebolla y unas hojas de menta para decorar.

¿Qué os parece? ¿Preparados para salvarse de esa ola?

Otro día os explico el cuento de La princesa y el guisante que hoy ya es tarde.

Besos y feliz semana, corazones.

lunes, 24 de mayo de 2010

Isla

Cada ser humano es una isla. En el mejor de los casos, pertenece a un archipiélago. Aun así, cada isla es distinta de las otras. Algunas son fértiles, pródigas, ubérrimas. Otras son áridas, magras, resecas.
Cada ser humano es una isla, donde sólo convive con su conciencia y en ocasiones con un lago quieto que le informa sobre qué rasgos asume su rostro de náufrago.
Cuando el ser humano se aburre de su soledad, entonces se comunica con otra u otras islas, a nado, o en balsa, en lanchas o en canoas. Y en la otra isla conoce a otros náufragos y también a otras náufragas, y a veces se enamora.
El amor une a las islas como una corriente. A veces dos islas copulan y nace un islote.

13. Isla, Vivir adrede de Mario Benedetti


No creo que sea fruto del aburrimiento sino del amor lo que ha hecho que este año hayan llegado a nuestras vidas: Cai, Ángel, Hugo, Aniol, las mellizas Uxía e Iratxe, Eloy y Guim. Y pronto conoceremos a Martina, Bernat, Julia (Cocinando para Lola),
el hermanito de Marc y Cristina (todavía no se sabe si será Cristina pero en el blog escribo yo ¡Jeje!). La entrada de hoy la dedico con mucho cariño a est@s bebés, a sus hermanit@s y a sus mamis y papis. Os he preparado un postre sencillo, que les va a gustar. Su elaboración no os va ocupar mucho tiempo, entre toma y toma lo vais a preparar tranquilamente o no; una rica panna cotta. Sigo la receta de Velsid (pinchad aquí) como base y a partir de ésta estoy experimentando con la fruta que me apetece. También se puede hacer la clásica con una vaina de vainilla y se acompaña de fruta natural o mermelada.


Panna cotta di mango


Ingredientes

Básicos
- 300ml. de leche
- 300ml de nata líquida
- 6 hojas de gelatina.
- 100 gr. de azúcar

Opcionales:
- 2 plátanos si decides hacerla de este sabor (perfecta la receta de Velsid)
- 450 gr. de mango muy madurito o en almíbar (yo solo tenía una lata pequeña a mano y me quedó una panna cotta con esencia de mango)

- De caramelo (ésta ya la publiqué, ver pinchando aquí)
- Sin ninguna fruta cuece en la leche la vaina de vainilla o ponedle una cucharadita de esencia de vainilla.



Preparación
- Ponemos en remojo las hojas de gelatina.
- En un cazo ponemos a calentar la leche, la nata y el azúcar y llevamos a ebullición.
- Si la hacemos de algún sabor preparemos la fruta, que estará limpia de cualquier piel, hilillo…
La trituramos.
- Una vez que ha hervido el preparado que teníamos en el cazo, retiramos del fuego y no dejamos de remover, unos minutos después agregaremos a la mezcla las hojas de gelatina, de una en una sin dejar de remover con unas varillas. Por último añadiremos la fruta triturada y mezclamos. Ahora ya podemos llenar los moldes que queramos, cuando se enfríen los metemos de 3 a 4 horas en la nevera y listas para comer bien fresquitas.


De plátano, con minis gofres y caramelo


De plátano doblando las medidas


De vainilla con base de bizcocho de chocolate y coulis de fresa


De vainilla con mermelada de frutas del bosque, rodajas de kiwi y pistachos

Ya véis que yo cuando me abuuuurro, no hago turismo, me pongo hacer panna cotta...

Salud y buenos alimentos mis queridísm@s.

Un beso y feliz semana, corazones.

jueves, 13 de mayo de 2010

¡Que te den calabazas!

¿Te dan calabazas?
Como dice la fantástica Mireia Carbó, en su libro de recetas
“La cocina te da juego”: si te dan calabazas o partes peras…siempre puedes hacer esta crema espléndida que te reanimará: Crema de calabaza con tostones de pera (o sin).
En este caso nos dieron un buen trozo de calabaza, un amigo del huerto, no un amigo que me lleva al huerto…¡Jejeje! A ver si para de llover y hago unas fotos de la huerta para que la veáis. Sigamos. Aprovechando los interminables días de lluvía, los cuales no invitan a abandonar la cuchara, no dudé en hacer una cremita de calabaza, sin pera pero con champis. ¿Qué os parece?



Ingredientes
- 400gr. aprox. de calabaza
- 2 puerros
- 1 patata
- 1 cuchara de mantequilla
- 125 ml de nata líquida (opcional). Al llevar patata opté por no ponerle.
- 1,5 litro de agua
- Perejil
- Sal y pimienta

- Champiñones salteados y perejil para decorar

Preparación
- Lavamos los puerros, quitamos la parte más verde y cortamos en rodajitas la parte blanca.
- Ahora pelamos la calabaza y cortamos la pulpa en dados. Así también repetimos con la patata.
- En una cazuela o sartén deshacemos la mantequilla a fuego lento, a continuación añadiremos los trocitos de puerros y de calabaza, dejamos unos minutos. Cubrimos con agua y ya podemos incorporar los dados de patatas con una pizca de sal.
- Dejamos cocer unos 30 minutos aprox.
- Retiramos parte del agua y reservamos.
- Trituramos hasta que nos quede una crema bien fina. Añadiremos parte del agua reservada si vemos que queda muy espesa.
- La probamos por si es necesario algo más de sal. Y echamos pimienta al gusto.

- Emplatamos, decoramos con champiñones laminados y salpicamos con perejil.

Fácil, rico y sano. ¡Que os aproveche! Y no olvidéis el parraguas.




Más humor tonto para gente intelegente pinchando aquí.

Un abrazo, corazones.

jueves, 6 de mayo de 2010

Cocina para disfrutar

Siempre me había quejado que no me tocaba nada, pues ya no lo puedo decir. Aunque este post llega con retraso, ya sabéis que si la dicha es buena nunca es tarde. Además, da continuidad a la anterior entrada que dedicaba a las personas maravillosas que se cruzan en nuestro camino. Ahí está la protagonista de la entrada de hoy; Laura de Cocina para disfrutar, una de las madrinas de Haciendo Buenas Migas. A finales de enero celebraba su primer año en la blogesfera, haciendo un sorteo entre los seguidores que dejaran un comentario aquel día. Ya nos anunciaba uno de los regalos, un precioso neceser que había confeccionado Noelia, su hermana. Y es que si una es la reina de la repostería la otra es de la aguja y las tijeras. Así es que dejé un comentario para felicitarle su andadura en la blogesfera y por las manitas de la costurera. También aproveché para agrecederle su continuo apoyo e infinitos consejos que voy recibiendo con mucho cariño…¡Muchas gracias, Laura!
¿Pero que os estaba contando? ¡Aaah! ¡Siiii!
Me tocó el sorteo, mi nombre fue el que sacó la mano inocente del sobrinito de Laura. Me llamó enseguida y no tenía palabras… No me lo podía creer. ¿A mí que nunca antes me había tocado nada? Había sido la afortunada. Por primera vez en mi vida…¡Uuuau! ¿Pero qué me había tocado? La monada de neceser y…


Las riquísimas galletas de coco y chocolate , (pinchad encima del título para leer la receta). No las pude fotografiar fuera de la bandeja, desaparecieron en un momento.


Las gominolas de fresa y limón en forma de corazón, estrella, pingüino, delfín...¡Pero que duuulce más tierno!

El precioso neceser con su forro y cremallera a juego. ¡Qué manitas, Noelia!

El magnífico lote preparado por Laura, antes de abrirlo. No le faltaba detalle. Mirad que bonitas las etiquetas de "Cocina para disfrutar".


Contenta con mis regalitos y los buenos momentos compartidos con esta gran cocinera repostera. ¡Por muchos años más! ¡Gracias, amiga!

Si tenéis un ratito no dejéis de Cocinar para disfrutar.

¡Besos, corazones!



viernes, 23 de abril de 2010

El Principito

El principito se fue a ver nuevamente las rosas.
-No sois en absoluto parecidas a mi rosa; no sois nada aún- les dijo-Nadie os ha domesticado y no habéis domesticado a nadie. Sois como mi zorro. No era más que un zorro semejante a cien mil otros. Pero yo lo hice mi amigo y ahora es único en el mundo.
Y las rosas se sintieron molestas.
- Sois bellas, pero estáis vacías- continuó-. No se puede morir por vosotras. Sin duda que un transeúnte común creerá que mi rosa se os parece. Pero ella sola es más importante que todas vosotras, puesto que es ella la rosa que he regalado. Puesto que es ella la rosa que puse bajo un globo. Puesto que es ella la rosa que abrigué con el biombo. Puesto que es ella la rosa cuyas orugas maté (salvo las dos o tres que se hicieron mariposas). Puesto que es ella la rosa a la que escuché quejarse, o alabarse, o aun, algunas veces, callarse. Porque ella es mi rosa.


Y volvió hacia el zorro.
- Adiós- dijo.
- Adiós- dijo el zorro-. He aquí mi secreto. Es muy simple: no se ve bien sino con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos.
- Lo esencial es invisible a los ojos- repitió el principito, a fin de acordarse.
- El tiempo que perdiste por tu rosa hace que tu rosa sea tan importante.
- El tiempo que perdiste por tu rosa hace que tu rosa…- dijo el principito, a fin de acordarse.
- Los hombres han olvidado esta verdad- dijo el zorro-. Pero tú no debes olvidarla. Eres responsable para siempre de lo que has domesticado. Eres responsable de tu rosa…
- Soy responsable de mi rosa…- repitió el principito, a fin de acordarse.

El Principito de Antoine de Saint-Exupéry.
(Final del capítulo XXI)

Esta lectura fue parte de un regalo, de un Sant Jordi inolvidable. Me regalaron una rosa que venía atada en un libro, El Principito con las acuarelas originales del autor, con un separador de páginas hecho con fotos del chico más guapo y estupendo que podía existir.
El separador descansaba en la página que os he copiado. Cada vez que lo releo me emociona.

Con los años te das cuenta de las personas que han sido o son importantes, las que son únicas entre los demás, únicas en el mundo para ti. Aquellas que te dejan huella porque te han aportado pequeños grandes tesoros de la vida. Es así que una se siente feliz y agradecida de haberse cruzado con ellas.

Hoy 23 de abril es un día que me gusta especialmente, parece que de repente la primavera se apodera de la calle, los libros y las rosas también. ¡Es una fiesta! Por un día nos olvidamos de los problemas cotidianos y las mugres de este siglo. Por eso, hoy he dedicido que es el día ideal para hacer un homenaje a tod@s aquell@s personas maravillosas, que quiero mucho. Esta entrada y este entrante es para vosotr@s: “Son de Mar”, que debe su nombre a una novela de Manuel Vicent que me fascinó.



Ingredientes
- gambas saladas
- mejillones
- pimiento rojo
- pimiento verde
- tomate
- cebolla
- aceite
- sal
- pimienta
- vinagre
- limón y perejil para decorar

Preparación
- Lavamos los mejillones y los colocamos en una olla con un dedo de agua, a fuego medio hasta que se abran.
- Picamos el pimiento rojo, el pimiento verde, el tomate y la cebolla. Podemos incorporar un huevo duro que enriquece el picadillo. Una vez tenemos todo bien picado aliñamos con sal, aceite, un chorrito de vinagre y pimienta al gusto.
- Cogemos la parte de la concha dónde se encuentra el mejillón y lo rellenamos con el picadillo.
- A continuación montamos el plato, utilizaremos unos palitos de brocheta para hacer el montadito con las gambas. Este lo pincharemos en medio limón para que se aguante, lo decoraremos con rodajitas de pimiento y limón (ver la foto). En el resto de la superficie del plato, como si de barcas se trataran, distribuiremos los mejillones rellenos.
Y ahora ya es cuestión de decidir si tomar una cerveza o abrir un albariño.

“Hay gente que con sólo decir una palabra enciende la ilusión y los rosales” (Hamlet Lima Quintana). ¡Vosotros!
¡Feliz fin de semana, corazones!

lunes, 12 de abril de 2010

Contigo fresas y mascarpone

Y llegamos a la tercera y última receta de la CocinaTerapia:
A las penas… ¡Mascarpone!
Si con el postre de naranja tuvisteis un flechazo, un amor a primera vista, permitirme la osadía: con este cremoso de fresa y mascarpone, que descubrí en Las comiditas de Cris, solo os puedo recomendar que tengáis una botella bien fría de cava y una buena banda sonora para acompañarlo.




Seguid la receta en el blog de Cris (pinchad encima del nombre la autora). ¡Gracias, Cris!

Antes de despedirnos quiero felicitar a Gemma por su más de un millón de visitas a La Cuina de casa y la nueva etapa en Cuina. Enhorabona! ¡Gracias por endulzarnos los días!

¡Feliz semana, corazones!

lunes, 5 de abril de 2010

Su media naranja

Leía en un artículo de la nueva revista de Eduard Punset que el amor no es ciego, a pesar de la insistencia de los poetas. Ante todo nos deslumbra la belleza y la juventud. ¡Como en la gastronomía! Comemos por la vista, te llama la atención, lo encuentras irresistible, no dudas en llevártelo a la boca, le hincas el diente, arrugas la cara como si jugo de limón se tratara y piensas “¿Pero esto qué es?”…Luego lo quieres arreglar, excusas tu cara diciendo tonterías, una detrás de la otra…Una vez más has caído en la tentación.
También nos pasa con las personas, pero no os preocupéis, en la entrada de hoy no voy a dar la lección magistral de cómo encontrar tu media naranja, acabaríamos tomándonos un tequila y sin dar con la receta mágica. Mejor os dejo con un postre de esos que entran por los ojos y que no os defraudará. ¡No puedes dejar de comer! Es el segundo postre de mascarpone de la trilogía de la CocinaTerapia: A las penas… ¡Mascarpone!



Ingredientes
- Naranjas, en función de los comensales, media naranja por persona.
- Mandarinas, cantidad a ojo. Va a gusto. Buscar la proporción de trocitos de mandarina y mascarpone.
- Queso mascarpone
- Azúcar
- Virutas de chocolate

Preparación
- Cogemos las naranjas, las cortamos por la mitad con la finalidad de hacer dos cuencos. En cada mitad haremos un corte al final de la naranja para que se nos aguante sin balancearse. A continuación las vaciamos y reservamos.


- Pelamos las mandarinas y sacamos todos los gajos, troceamos y dejamos limpios de cualquier hilillo. Reservamos.

- En un bol abocamos el mascarpone y le añadimos una o dos cucharaditas de azúcar, mezclamos y probamos con un gajo de mandarina, si nos gusta ya podemos continuar, incorporamos los gajos al mascarpone y rellenamos las mitades de naranja. Dejamos unos gajitos para la decoración y los acompañamos con alguna chuche de chocolate. ¡Y listo para disfutar!





En casa se quedaron mudos, a ver si vosotr@s me podéis contar.
Me despido con una foto de una de mis componentes o miembra de mi equipo de cocina, la señorita Mandolina, la que se encargó de hacer las láminas finas de mango en el anterior postre. Esta foto se la dedico a nuestro querido amigo Juan, de Cocina por afición. Nunca olvidéis ese ingrediente básico de la vida, el humor. ¡Gracias a tod@s por vuestros comentarios!



¡Un fuerte abrazo, corazones!


domingo, 28 de marzo de 2010

CocinaTerapia

Parece que fue ayer que celebrábamos la bienvenida del 2010,
el año que iba a ser 10, pero eso está por ver. ¡Qué tres meses más arduos e intensivos! Y aunque no me rindo a la primera, mis gafas rosas, día sí día también, en algún momento se empañan de vaho gris casi negro. Me pesan. Si me las quito estoy perdida. Me consuela refugiarme en la cocina, allí puedo manejarme sin ellas…¡Soy la estrella! ¡La estrella Michelín! Pero no por el nivel de mis platos si no por la figurita que está tomando mi cuerpo. ¡Es que no nos estamos de nada! A las penas…¡Mascarpone!

Pues ya van tres postres con mascarpone en lo que va de mes, os dejo con el primero: Canutillos de mango caramelizado rellenos de mascarpone con salsa de frambuesa. Lo probé en el restaurante Basílico de Barcelona, imagino que se debe hacer más o menos así…





Ingredientes
-Mango: la cantidad va en función de los rollitos que quieras hacer y la habilidad que tengas para graduar la mandolina.
-Mascarpone
-Azúcar
-Mantequilla
-Mermelada de frambuesa
-Hierbabuena seca y molida

Preparación
-Pelamos los mangos y los hacemos finas lonchas con la ayuda de una mandolina (atención: finas pero que se puedan hacer un canutillo sin romperlas). Estas rebanadas de mango las pasamos por una sartén caliente donde hemos derretido un poco de mantequilla. Dejamos que el mango coja un color doradito.


-A continuación, añadimos un poco de azúcar al mascarpone (al gusto) y procedemos hacer los mini canelones, es decir, cada loncha de mango la rellenamos de mascarpone. Vamos emplatando.


-Ahora preparamos el caramelo, podéis utilizar el que ya viene hecho pero el sabor no es el mismo. Esta vez, me dejé llevar y puse azúcar moreno con una cucharadita de mantequilla, pasó por un caramelo casero. Rociamos los canutillos con el caramelo y los acompañamos con la salsa de frambuesa (= cucharada de mermelada, más cucharada de agua y dejamos que hierva pero no que se pegue) y ya por último, una suave lluvia de hierbabuena.


Espero que os guste esta refrescante combinación de sabores y texturas.
¡Feliz descanso santo! Y a los que no tengamos, pues paciencia, esta semana será más corta.
¡Besos!

sábado, 13 de marzo de 2010

El gusto es mío

Después de un mes sin aparecer por mi querido Haciendo Buenas Migas, no por no tener ganas pero si por falta de tiempo aprovecho este ratito para encontrarme de nuevos con todos vosotros, ¡Mis queridísim@s!

Hoy sin más preliminares os dejo con un plato de esos de chuparse los dedos, ¡Va por ustedes!

Catxofino una exquisita combinación de productos de mar y montaña. Una receta que nos enseñan a preparar Pere Bahí y Anna Casadevall del restaurant La Xicra, Palafrugell, Baix Empordà.

El restaurante se encuentra en la calle Sant Antoni, calle en la que Josep Pla escribió “El carrer Estret” (La Calle Estrecha).
Con este plato se nos presenta una oportunidad excepcional para disfrutar de los vinitos del Empordà, abrid una botella de Peralada o un Espelt y que no os falte un buen pan para la salsita.













Ingredientes


- 4 cigalas grandes (yo utilicé más pequeñas y tripliqué la cantidad)
- 16 mejillones grandes
- 300g. de tocinillo
- 3 ajos, picados muy finos
- 1 ramillete de perejil picado
- Un tomate rallado sin semillas
- 1 rebanada de pan rústico del día anterior
- 1 huevo
- 1 cebolla mediana picada
- 1 vaso de vino blanco
- 1 cuchara de harina
- Pimienta, sal y aceite
- 1 cucharada de “allioli” (lo pongo para seguir la receta original pero este paso final yo me lo salté)


Preparación

- Desmigajamos la rebanada de pan y añadimos el tocinillo picadito, los ajos, el prejil y el huevo. Salpimentamos, lo mezclamos bien y con un poco de harina vamos haciendo las albóndigas, se pueden hacer de la medida que quieras. Yo opté por una medida mini mini. Las freímos y las reservamos.

- En una cazuela, pasamos las cigalas y las reservamos. En el mismo aceite sofreímos lentamente la cebolla picada hasta que coja un color doradito. Entonces, añadiremos el vino blanco i lo dejamos reducir para que pierda el alcohol.

- Ahora ya podemos echar el tomate, previament confitado (¡Ui, este detalle se me pasó!). Añadiremos la cuchara de harina y lo cubrimos de agua. Cuando arranque a hervir incorporaremos las cigalas, los mejillos, sal, pimienta y las albóndigas. Dejamos cocer 10 minutos.

- Aquí el último paso que no lo hice porque ya me parecía riquísimo sin el “allioli”. Pero si queréis seguir la receta de la cocina de "La Xicra"; en un bol se pone una cucharada de “allioli” y se añaden cuatro cucharas de la salsa, se mezcla bien y acto seguido se vierte en la cazuela dejándolo cocer 2 minutos más.

¡Ahora sí, listo para servir! Espero que os guste.
¡Un abrazo, corazones!

lunes, 8 de febrero de 2010

Sobre cartas de amor

Una carta de amor
no es un naipe de amor

una carta de amor tampoco es una carta
pastoral o crédito / de pago o fletamento

en cambio se asemeja a una carta de amparo
ya que si la alegría o la tristeza
se animan a escribir una carta de amor
es porque en las entrañas de la noche
se abren la euforia o la congoja
las cenizas se olvidan de su hoguera
o la culpa se asila en su pasado

una carta de amor
es por lo general un pobre afluente
de un río caudaloso
y nunca está a la altura del paisaje
ni de los ojos que miraron verdes
ni de los labios dulces
que besaron temblando o no besaron
ni del cielo que a veces se desploma
en trombas en escarnio o en granizo

una carta de amor puede enviarse
desde un altozano o desde una mazmorra
desde la exaltación o desde el duelo
pero no hay caso / siempre
será tan sólo un calco
una copia frugal del sentimiento

una carta de amor no es el amor
sino un informe de la ausencia

Mario Benedetti





Un postre con amor, flan de queso:



Ingredientes

- 1/2 l. de nata líquída

- 200gr. de queso para untar

- Un sobre y medio de cuajada en polvo (los sobres preparados de Royal)

- 3 cucharadas soperas de azúcar

- caramelo o dulce de leche



Preparación

- Ponemos en un cazo la nata y el queso, a fuego lento y no dejamos de remover para que se vaya deshaciendo y no se pegue.

- Disolvemos los polvos de cuajada en medio vaso de leche con el azúcar y acto seguido lo añadimos al cazo, seguimos removiendo. Dejamos hervir de tres a cuatro minutos.

- Preparamos un molde con caramelo, añadimos la mezcla que tenemos lista en el cazo. Si preferís no pongáis nada y una vez emplatado el flan lo decoráis con dulce de leche.



¡Espero que os guste! ¡Un beso y feliz semana, corazones!


martes, 26 de enero de 2010

Las tardes de enero

Va cayendo la noche: La bruma
ha bajado a los montes el cielo:
Una lluvia menuda y monótona
humedece los árboles secos.
El rumor de sus gotas penetra
hasta el fondo sagrado del pecho,
donde el alma, dulcísima, esconde
su perfume de amor y recuerdos.
¡Cómo cae la bruma en en alma!
¡Qué tristeza de vagos misterios
en sus nieblas heladas esconden
esas tardes sin sol ni luceros!
En las tardes de rosas y brisas
los dolores se olvidan, riendo,
y las penas glaciales se ocultan
tras los ojos radiantes de fuego.
Cuando el frío desciende a la tierra,
inundando las frentes de invierno,
se reflejan las almas marchitas
a través de los pálidos cuerpos.
Y hay un algo de pena insondable
en los ojos sin lumbre del cielo,
y las largas miradas se pierden
en la nada sin fe de los sueños.
La nostalgia, tristísima, arroja
en las almas su amargo silencio,
Y los niños se duermen soñando
con ladrones y lobos hambrientos.
Los jardines se mueren de frío;
en sus largos caminos desiertos
no hay rosales cubiertos de rosas,
no hay sonrisas, suspiros ni besos.
¡Como cae la bruma en el alma
perfumada de amor y recuerdos!
¡Cuantas almas se van de la vida
estas tardes sin sol ni luceros!
Juan Ramón Jiménez


Esos paisajes invernales que reflejan nuestra alma, que arrastra esa dulce melancolía que nos hace viajar a los recuerdos y ensueños del pasado. Cuántas tardes nos acercamos a la campiña de Córdoba, entre olivos, compartiendo las fatigas e ilusiones de esta mozuela de ojos azules, la abuela María.




Con sus 100 años recién cumplidos (foto cedida por Ana Sarrión). ¡Abuelita que mañana ya hará un mes!
Esperamos compartir muchos años más, anécdotas y fabulosas meriendas alrededor del brasero.


Os dejo hoy con una crema de puerros. Si os esperabais un plato de la abuela, otro día se pide ser la prota de nuevo, ya nos anuncia que explicará las gachas de harina con miel de caña.




Ingredientes

- 4 puerros

- 1 cebolla mediana

- 1 patata mediana

- Unos 40gr. de margarina

- 1/2 l. de caldo

- 1/2 l de leche semidesnatada

- bacon

-sal y pimienta


Preparación
- Doramos la cebolla en una sartén con la marganita. Más tarde echaremos los puerros picaditos y por último la patata troceada. Salpimentamos.

- Incoporamos el sofrito en una olla con el caldo y dejamos cocer unos 35 minutos.

- Por último añadiremos la leche semidesnatada, trituraremos y le daremos el toque final de sal. Dejamos hervir unos minutillos más y ya estará listo. Emplatamos y decoramos con bacon y alguna verdura que tengamos a mano (champis, tiras de calabacín...).

¡Qué aproveche!


Antes de despedirme doy la bienvenida a las nuevas amigas de Haciendo Buenas Migas (ver Conectamos):
Nos vamos hasta Argentina, allí en Aromas de mamá nos espera la dulce Gabriela Mónica...Y un premio, "Premio de la felicidad". ¡Muchísimas gracias, amiga! ¡Qué ilusión! ¡Bienvenida!
Nos reencontramos en Madrid con La Cocina de Lucia, que después de las vacaciones ha vuelto con mucha energía y unos platos exquisitos. ¡Tomen nota! Y por último, pasamos entre Barcelona y New Zealand, dónde Nuria nos abre las puertas The Kiwi Kitchen. ¡Nos encanta!

¡Muchas gracias por vuestra visita, no dejéis de venir y escribir!


¡Ah! Enviamos un abrazo muy fuerte acompañado de un enorme enhorabuena a Sílvia de Mi dulce tentación por su bronce al mejor blog gatronómico 2009, concedido por Canal Cocina. ¡Felicidades, guapa!

No olvidéis que sol sale todas las mañanas para tod@s.

¡Feliz semana corazones!

jueves, 7 de enero de 2010

Sin azúcares añadidos

El 21 de diciembre quería publicar un post y dedicármelo porque era mi cumpleaños y me apetecía compartir con vosotros la alegría.
El 25 de diciembre quería escribir para felicitaros las fiestas y agradeceros los comentarios y visitas a esta que es vuestra casa.
El día 27 de diciembre quería invitaros, a toda la blogesfera, a la fiesta de cumpleaños de mi abuela en su 100 aniversario.
El día 29 de diciembre quería sincerarme escribiendo un post muy especial, dedicado aquellas personas que han hecho que este año sea inolvidable.
El día 31 de diciembre quería hacer balance y contaros lo bien que se ha portado el año conmigo y así desearos un feliz 2010.
El día 2 de enero quería una entrada de buenos propósitos, pero a estas alturas quién se va a creer que este año voy a ser una blogger más activa, ¡Jejeje!
El día 5 de enero quería hablar sobre las noches mágicas o las personas que hacen mágicos los días.
¡Aiiins! ¿No os pasa que a veces no encontráis las palabras? Parece que cuánto más sientes más muda te quedas...

Hoy quiero deciros: ¡Gracias por seguir ahí! ¡Muchas gracias por todo lo que me aportáis, un@s desde la blogesfera, otr@s a través de emails, algun@s con conversaciones interminables por teléfono y así también con l@s que tenemos la suerte de compartir el día a día, la vida en directo. ¡Qué emocionante! Con mucho cariño os dejo este postre dulce, dulce, como vosotros: panna cotta de caramelo.






Ingredientes
-250 ml.de leche (medida vaso de Nocilla)
-250 gr.de nata líquida (el brick pequeñín)
- 25 caramelos WerTher’s Original

- 4 hojas de gelatina (sí, neutra)

Elaboración
- Ponemos las hojas de gelatina en agua, en un cuenco por ejemplo, unos 5 minutos para que se hidraten.
- En un cazo o cazuela, echamos la leche, la nata y los caramelos, y los ponemos al fuego, removemos sin dejar que se peguen los caramelos en el fondo del cazuelo, paciencia, ya verás cómo se van deshaciendo.
- Una vez esten deshechos, escurrimos la gelatina y la incorporamos en el cazo, removiendo para que se disuelva bien con la mezcla. Y…¡Üalà! Listo para verter en moldes y una vez fríos a la nevera para dejar cuajar tranquilamente. Mejor hacerlos de un día para otro. Para esta cantidad de ingredientes, para que tengáis una idea, llenas unos 5 moldes de estos de papel de aluminio de usar y tirar.
- Y ya por último podéis servirla con alguna mini galleta de choco y/o caramelo.


¡Cariñitos y postres dulces para estos fríos de enero! ¡Un besazo, corazones!